
Me llueve el alma...
de Raquel Norma Smerkin Roitman, el Viernes, 04 de noviembr ...e de 2011 a las 13:14
Me llueve el alma
lágrimas rosadas,
no son de tristeza,
no son de angustia,
no son de la nada,
vienen desde dentro
como una sensibilidad
que envuelve mi corazón
de una tenue dulzura blanca...
Me llueve el alma,
y en cada gota
que de mi alma llueve,
siento el golpe suave
del amor
que a mi ser conmueve...
Me llueve el alma,
y no es de dolor,
es pura emoción
de un tiempo que cambia,
de un tiempo que promete
otra lluvia tornazolada
que cambie de color
la transparencia de mi alma...
Qué será de mí,
qué será de mi alma,
lloviendo a cántaros
sus nuevas aguas...
Vengan a mi
todos los ríos
que serpentean mis caminos,
los del pasado,
los del presente,
los del futuro...
Quiero que mi espíritu
se empape de estos
nuevos afluentes,
que hacen que en mi alma
así, tan de repente,
llueva, la renovación
de gotas nuevas...
Me llueve el alma,
no es de desazón,
no es de nostalgia,
es de una sublime sensación,
de que algo me inunda
sin que yo sepa
cual es su maravillosa substancia...
Pienso que quizás,
será una lluvia que anuncia
un nuevo momento
para vivir a flor de piel
mis esperanzas...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
4.11.2011
de Raquel Norma Smerkin Roitman, el Viernes, 04 de noviembr ...e de 2011 a las 13:14
Me llueve el alma
lágrimas rosadas,
no son de tristeza,
no son de angustia,
no son de la nada,
vienen desde dentro
como una sensibilidad
que envuelve mi corazón
de una tenue dulzura blanca...
Me llueve el alma,
y en cada gota
que de mi alma llueve,
siento el golpe suave
del amor
que a mi ser conmueve...
Me llueve el alma,
y no es de dolor,
es pura emoción
de un tiempo que cambia,
de un tiempo que promete
otra lluvia tornazolada
que cambie de color
la transparencia de mi alma...
Qué será de mí,
qué será de mi alma,
lloviendo a cántaros
sus nuevas aguas...
Vengan a mi
todos los ríos
que serpentean mis caminos,
los del pasado,
los del presente,
los del futuro...
Quiero que mi espíritu
se empape de estos
nuevos afluentes,
que hacen que en mi alma
así, tan de repente,
llueva, la renovación
de gotas nuevas...
Me llueve el alma,
no es de desazón,
no es de nostalgia,
es de una sublime sensación,
de que algo me inunda
sin que yo sepa
cual es su maravillosa substancia...
Pienso que quizás,
será una lluvia que anuncia
un nuevo momento
para vivir a flor de piel
mis esperanzas...
Autoría: Raquel Norma Smerkin Roitman
4.11.2011
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