miércoles, 9 de noviembre de 2011

No te amé para...


No te amé para... de© Raquel Norma Smerkin Roitman
No te amé para...
aturdirme en el bullicio
de un encuentro,
ni me sobraba el tiempo
de un pasado amargo,
para poder olvidarlo...
No te amé para...
aliviar mi corazón,
para vendar mi dolor,
ni para inventarme
una ilusión...
No te amé porque...
el aburrimiento
sabía a descontento,
y el alma pedía
llenarla con urgencia
con falsas experiencias...
No te amé, por amar
aquello que no alcanza
a llenar nuestro ser...
Sí te amé,
y en verdad lo hice
sin darme cuenta,
sin forzar nada,
sin querer...
Mi amor era como
una paloma que
se escapaba,
de una galera blanca,
una paloma con las alas
de la libertad,
que me enseñó a amar...
Y así aprendí a amarte,
con la ternura de las aves,
con la dulzura de las tardes,
con la valentía
que tenemos los cobardes...
Se me escapaba
entre el corazón y
el alma,
esas ansias de estrenarme en tí,
como ser recién enamorado
entre tus brazos...
Sí te amé descalza
entre las espinas,
subiendo las colinas del dolor,
cubriendo de garras
al corazón,
para que siga escalando
este gran amor...
No te amé
para renunciarte,
para olvidarte,
para desvalorizarte,
Si te amé para...
vivirte como un todo,
para valorarte a mi modo,
para entregarme
íntegramente a tí,
compartiendo todos mis contornos...
Si te amé...
para amarte...
con ello está dicho todo...
Autoría: ©Raquel Norma Smerkin Roitman
9.11.2011
©Todos los derechos reservados 2011

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